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lunes, 29 de octubre de 2012

Sentimiento contrario



¿Podemos estar en el final de la caída?.

Gran euforia en 2007 provoco la caída del 2008 y este pesimismo extremo provocara la vuelta hacia arriba de los mercados.

martes, 2 de octubre de 2012

Claves del problema español según Alemania. Así nos ven..

En Alemania crece la critica contra la supuesta “mentalidad de fiesta” de los españoles; en España los medios cada vez son más negativos con la supuesta dureza de la canciller Merkel. Pensamos que la situación es mucho más compleja de lo que presentan ambos gobiernos y la mayoría de los medios. España no es Grecia, pero España puede ser un paciente crónico si Alemania, junto con Europa, no contribuye a solucionar sus verdaderos problemas.
 
 
España no debería recibir más dinero sin que se cambie a fondo el sistema político y económico, hoy en manos de una oligarquía política aliada con la oligarquía económica y financiera, y sin que se aumente la participación ciudadana real en las decisiones políticas. Para no perpetuar la crisis y endeudar a los españoles durante generaciones, el Gobierno español debe reformar a fondo la administración de las comunidades autónomas y los ayuntamientos, en su mayoría en bancarrota y completamente fuera de control, sometiendo a referéndum el modelo de Estado.
 
 
Este tema es la clave del futuro de España, porque las regiones, ayuntamientos y diputaciones son los responsables de los dos tercios del gasto público -234.000 millones frente a 118.000 el Estado en 2011-, excluyendo la Seguridad Social -23.000 millones-, y este gasto se realiza en condiciones de descontrol, despilfarro y corrupción totalmente inaceptables. Las razones verdaderas de la crisis del país, en consonancia con lo dicho, nada tienen que ver con salarios demasiado altos -un 60 % de la población ocupada gana menos de 1.000 euros/mes-, pensiones demasiado altas -la pensión media es de 785 euros, el 63% de la media de la UE-15- o pocas horas de trabajo, como se ha trasmitido a veces desde Alemania. A España tampoco le falta talento, ni capacidad empresarial ni creatividad. Tiene grandes pensadores, creativos, ingenieros, médicos excelentes y gestores de primer nivel.
 
 
La razón de la enfermedad de España es un modelo de Estado inviable, fuente de todo nepotismo y de toda corrupción, impuesto por una oligarquía de partidos en connivencia con las oligarquías financiera y económica, y con el poder judicial y los organismos de control a su servicio. En España no existe separación de poderes, ni independencia del poder judicial, ni los diputados representan a los ciudadanos, solo a los partidos que los ponen en una lista. Todo esto lleva también a una economía sumergida que llega al 20% del PIB y que frena la competencia, la eficacia y el desarrollo del país. Además, detrae recursos con los que podrían financiarse educación y sanidad.
 
 
Las ayudas para España, igual que para otros posible candidatos de rescates, no deben ir a bancos ya casi en bancarrota y fuertemente politizados. En la CAM, el Gobierno ha comprometido 16.000 millones de dinero público en lugar de cerrarla; en Bankia, 23.000, y el Ejecutivo acaba de darle 5.000 millones urgentemente para cubrir pérdidas en vez de cerrarla, y además de forma tan extraña que despierta todo tipo de recelos. ¿Por qué se ha utilizado el dinero de los españoles (FROB) en vez de esperar los fondos de la UE? Es lícito suponer que la razón es la siguiente: los bancos no quieren que la UE investigue sus cuentas.
 
 
Control estricto y duras condiciones
 
¿Por qué se ha utilizado el dinero de los españoles (FROB) en vez de esperar los fondos de la UE? Es lícito suponer que la razón es la siguiente: los bancos no quieren que la UE investigue sus cuentas
Ya el caso de Grecia ha demostrado que las ayudas europeas tienen que estar vinculadas a un control estricto y condiciones duras. Esas condiciones no pueden solamente representar recortes sociales o subidas brutales de impuestos, como hace ahora el Gobierno de Mariano Rajoy con la excusa de Europa. Se tiene que cambiar más en España que cortar gasto social, que de todos modos es mucho más bajo que en Alemania, y hay otros gastos infinitamentemás relevantes que se pueden eliminar. Además, los casos de corrupción resultan tan escandalosos, incluso en el propio Gobierno, que uno solo puede llegar a una conclusión: el dinero de Europa no puede ser manejado por personas tan increíblemente venales.
 
 
La pasada semana el ministro de Industria Soria -imputado también por corrupción urbanística en Canarias- acusó al ministro de Hacienda en el Consejo de Ministros de favorecer descaradamente a la empresa líder de renovables, Abengoa, de la que había sido asesor, en la nueva regulación de estas energías, que reciben más de 7.000 millones de euros de subvenciones anualmente. Y Rajoy, al que entregó una carta probatoria, ni dijo ni hizo absolutamente nada.
 
 
No puede permitirse por más tiempo este nivel de corrupción, y menos aún a 17 regiones funcionando como estados independientes, con todos los organismos multiplicados por 17, desde 17 servicios meteorológicos a 17 defensores del pueblo, con 200 embajadas, 50 canales de TV regionales en pérdida, 30.000 coches oficiales o 4.000 empresas públicas que emplean a 520.000 personas, creadas específicamente para ocultar deuda y colocar a familiares y amigos sin control ni fiscalización alguna. En conjunto, unos 120.000 millones, equivalentes al 11,4% del PIB, se despilfarran anualmente en un sistema de nepotismo, corrupción y falta de transparencia.
 
 
Y con esto se tiene que acabar, entre otras cosas, porque ya no hay dinero. Los últimos datos de las cuentas públicas conocidos la pasada semana son escalofriantes. El déficit del Estado a julio ascendió al 4,62% del PIB, frente a un déficit del 3,5% comprometido con la UE para todo el año (del 6,3% incluyendo regiones y ayuntamientos). Pero lo realmente inaudito es que España está gastando el doble de lo que ingresa. 101.000 millones de gasto a julio frente a 52.000 millones de ingresos, y precisamente para poder financiar el despilfarro de regiones y ayuntamientos, que no están en absoluto comprometidos con la consolidación fiscal.
 
 
El tema del déficit público es algo que roza la ciencia ficción, y que ilustra perfectamente la credibilidad de los dos últimos gobiernos de España. En noviembre de 2011, el Gobierno dijo que el déficit público era del 6% del PIB; a finales de diciembre, el nuevo Gobierno dijo que le habían engañado y que el déficit era superior al 8%, y que se tomaba tres meses para calcularlo con toda precisión. A finales de marzo, se dijo que definitivamente era del 8,5%, y ésta fue la cifra que se envió a Bruselas. Dos semanas después, la Comunidad de Madrid dijo que sus cifras eran erróneas y el Ayuntamiento de la capital igual… el déficit era ya del 8,7%.
 
 
Sin embargo, la semana pasada el INE dijo que el PIB de 2011 estaba sobrevalorado y, con la nueva cifra, el déficit era del 9,1%; dos días después, Valencia dijo que su déficit era de 3.000 millones más; o sea, que estamos en el 9,4% y las otras 15 CCAA y 8.120 ayuntamientos aún no han corregido sus cifras de 2011. Lo único que sabemos es que están todas infravaloradas. El déficit real de 2011 puede estar por encima del 11%, y en 2012 se esta gastando el doble de lo que se ingresa. Como dice el Gobierno de Rajoy, “estamos en la senda de convergencia”. Y es verdad… de convergencia hacia Grecia.
 
 
Claramente, la joven democracia española tiene todavía muchos déficits de representatividad y de democracia que deberían interesar a la canciller Merkel y también a Europa, si queremos evitar una Grecia multiplicada por cinco y salvar el euro. Esto es lo que ha hecho posible el despilfarro masivo de las ayudas europeas, con una asignación disparatada de las mismas, a pesar de que estas ayudas han supuesto una cifra mayor que la del Plan Marshall para toda Europa.
 
 
Es frustrante que a causa de este sistema oligárquico nepotista y corrupto se destroce talento y creatividad y que ahora muchos jóvenes se vean forzados a trabajar fuera, muchos en Alemania. Esa situación nos ha llevado a una distribución de riqueza que es de las más injustas de la OECD. La antaño fuerte clase media española está siendo literalmente aniquilada.
 
 
Resumiendo: no es una falta de voluntad de trabajo, como se piensa tal vez en algunos países del norte de Europa, lo que hace que España sufra la peor crisis económica de su Historia. Es un sistema corrupto e ineficiente. La crítica del Gobierno alemán y sus condiciones para un rescate de España se deberían concentrar en la solución de esos problemas. En caso contrario, solo conseguirán que una casta política incompetente y corrupta arruine a la nación para varias generaciones.
 
Fuente: Stefanie Claudia Müller es corresponsal alemana en Madrid y economista; Roberto Centeno es catedrático de Economía de la Universidad Politécnica

lunes, 30 de julio de 2012

La NO linealidad

"La gente cree que, si, por ejemplo, dos variables tienen una relación causal, un aumento continuo de una debería afectar siempre a la otra. Nuestro sistema emocional está diseñado para la causalidad lineal. Por ejemplo, estudia todos los días y aprende algo en proporción a lo que estudia. Si no tiene la sensación de que está avanzando, sus emociones harán que se sienta desmoralizado. Pero la realidad pocas veces nos da el privilegio de una progresión lineal positiva satisfactoria: puede que estudie el año entero y no aprenda nada y, después, salvo que se haya desanimado por falta de resultados y haya tirado la toalla, algo llegará como en una aparición. Mi socio Mark Spitznagel lo resume de la siguiente manera: imagine que está practicando todos los días, durante mucho tiempo, para aprender a tocar el piano, casi incapaz de tocar Chopsticks, de repente, descubre que es capaz de tocar Rachmaninov. Debido a esta no linealidad, la gente no puede comprender la naturaleza del suceso raro. Esto resume por qué hay caminos al éxito que no son aleatorios, pero muy pocas, muy, muy pocas personas tienen la resistencia mental necesaria para seguirlas. Las que ponen el esfuerzo adicional necesario reciben la recompensa. En mi profesión, se puede tener un título que se beneficiará de menores precios en el mercado, pero puede que no reacciones a esos precios hasta determinado punto crítico. La mayoría de la gente tira la toalla antes de alcanzar la recompensa."

Nassim Nicholas Taleb, en "¿Existe la suerte?"

martes, 24 de julio de 2012

Tendencias (Trends)


Extracto de la versión original en inglés , copyright © Ed Seykota, disponible en la página oficial del autor: www.tradingtribe.com

La tendencia es tu amiga excepto al final cuando se inclina.

Una tendencia es una disposición o directriz general en un conjunto de datos. Toda medida de la tendencia supone tomar una lectura actual y otra histórica para su comparación. Si la lectura actual es superior a la histórica, tenemos una tendencia alcista. Si es menor, una tendencia bajista. En el improbable caso de que coincidan, una tendencia lateral.

La dirección de la tendencia depende del método que empleamos para realizar la comparación. Los activos fluctúan minuto a minuto, día a día y año a año. Tenemos, por tanto una oferta enorme de puntos históricos para determinar la tendencia. Así, podemos establecer tantos casos de tendencia como queramos, en la dirección que queramos.

No existe tal cosa como la tendencia; Existe un sin fin de tendencias, en función del sistema que empleemos para determinarlas. La gente normalmente escoge un método para establecer la tendencia que cuadra con sus posiciones actuales y su visión del mercado.

Todos los métodos de definición de tendencias comparan varias combinaciones de precios históricos. Toda tendencia es histórica, ninguna existe en el presente.

No existe tal cosa como la tendencia actual. Cuando hablamos de tendencias estamos necesariamente proyectando nuestras propias definiciones.

lunes, 23 de julio de 2012

Hombre Rico, Hombre Pobre

La versión original en inglés está disponible en Dow Theory Letters Enlace externo, publicación editada por el célebre analista financiero Richard Russell, autor del artículo.


Ganar Dinero


Ganar dinero supone mucho más que predecir la dirección de los mercados de acciones o bonos o que intentar adivinar que acción o fondo doblará su valor en los próximos años. Para la gran mayoría de inversores, ganar dinero exige un plan, autodisciplina y deseo. Digo, "para la mayoría de las personas" porque si eres Steven Spielberg o Bill Gates no tienes que saber nada de los mercados, ni de rentabilidades o ratios precio-beneficio. Eres un prodigio en tu propio campo, y vas a hacer un montón de dinero como consecuencia de tu talento y habilidad. Pero este tipo de genios son poco frecuentes.

El inversor medio, tú y yo, no somos genios por lo que tenemos que disponer de un plan financiero. En vista de esto, ofrezco una serie de puntos de los que tenemos que ser conscientes si queremos ser serios a la hora de ganar dinero:


Regla 1: CAPITALIZAR


Una de las lecciones más importantes para enfrentarse a la vida moderna es que para sobrevivir tienes que tener dinero. Pero para vivir (subsistir) felizmente debes tener amor, salud (física y mental), libertad, desafío intelectual -y dinero-. Cuando les instruí a mis hijos sobre el dinero lo primero que les enseñé fue el uso de la "biblia del dinero". ¿Qué es la "biblia del dinero"?. Muy sencillo, son las tablas del tipo de interés compuesto.

Capitalizar es el camino real a la riqueza. Es el camino seguro, el camino cierto, y afortunadamente, todo el mundo puede hacerlo. Para capitalizar con éxito necesitas: tenacidad para mantener un plan de ahorro sistemático. Necesitas inteligencia para saber lo que haces y por qué. Necesitas conocimiento de las tablas matemáticas para comprender las magníficas ganancias que te esperan si sigues fielmente el proceso de la capitalización. Y, por supuesto, necesitas tiempo, tiempo que permita al poder de la capitalización trabajar para ti. Recuerda, la capitalización sólo funciona a lo largo del tiempo.

Hay dos factores a entender en el proceso de capitalización. El primero es obvio: Capitalizar exige sacrificio (no puedes gastarlo y todavía debes ahorrarlo). Segundo, capitalizar es aburrido: a-b-u-r-r-i-d-o. ¿O debo decir que es aburrido hasta que -después de siete u ocho años- el dinero empieza a florecer? Entonces, créanme, capitalizar ser vuelve muy interesante. De hecho, ¡pasa a ser completamente fascinante!

Para subrayar el poder de la capitalización, incluyo este extraordinario estudio, por gentileza de "Market Logic" de Ft. Lauderdale, Florida 33306.

En el estudio suponemos que el inversor (B) abre un plan de pensiones a la edad de 19 años. Durante 7 años consecutivos ingresa 2.000 dólares en su plan a un tipo de incremento medio del 10%. Después de estos siete años NO hace MÁS aportaciones. Terminó.

Un segundo inversor (A) no hace contribuciones hasta los 26 años (la edad a la que el inversor B finalizó de hacer las suyas). Desde entonces A ingresa todos los años 2.000 dólares hasta los 65 (a la misma tasa teórica del 10%).

Ahora, estudien los asombrosos resultados. B, que hizo sus ingresos antes y sólo en 7 cuotas acaba con MÁS dinero que A que hizo 40 aportaciones pero MÁS TARDE. La diferencia entre ambos es que B ha tenido siete años anteriores de capitalización que A. Esos 7 años valen más las 33 aportaciones adicionales a A.

Este es un estudio que sugiero que enseñéis a vuestros hijos. Es un estudio que he seguido en vida y funciona. Podéis capitalizar con bonos municipales, un buen fondo monetario, letras del tesoro u obligaciones del estado a 5 años.


Aportaciones

(eljugo.es: Nótese que el inversor A ha multiplicado su inversión por 66, mientras que B lo ha hecho en 11 veces)


Regla 2: NO PIERDAS DINERO


Puede que suene ingenuo pero, créanme, no lo es. Si quieres ser rico, no debes perder dinero, o quizás, deba decir no pierdas MUCHO dinero. ¿Regla absurda? Puede, pero la MAYORÍA DE PERSONAS PIERDEN DINERO en inversiones desastrosas, apuestas, timos, por avaricia o elegir mal el momento. Sí, después de cinco décadas invirtiendo y hablando con inversores puedo deciros que la mayoría pierden dinero y gran tiempo -en bolsa, en opciones, futuros, inmuebles, prestamos, apuestas sin cabeza y su propio negocio-.


Regla 3: HOMBRE RICO, HOMBRE POBRE


En el mundo de los negocios el inversor acaudalado tiene una ventaja sobre el pequeño, el aficionado y el trader neófito. La ventaja de la que disfruta el gran inversor es que NO NECESITA LOS MERCADOS. Puedo empezar a deciros la diferencia que hay, tanto mentalmente como en la forma en la que uno maneja su dinero, y no acabaría nunca.

El inversor rico no necesita los mercados porque tiene ya toda la renta que necesita. El dinero le viene vía bonos, letras del tesoro, fondos monetarios, acciones e inmuebles. En otras palabras, nunca se siente presionado a ganar dinero en el mercado.

El inversor rico suele ser experto en VALORACIÓN. Cuando los bonos están baratos y la rentabilidad de los bonos extremadamente alta, compra bonos. Cuando las acciones son un chollo y su es rentabilidad atractiva, compra acciones. Cuando los inmuebles ofrecen valor, compra inmuebles. Cuando las obras de arte, la joyería fina o el oro "se regala", compra arte, diamantes u oro. En otras palabras, el inversor acaudalado pone el dinero donde está el valor.

Y si no hay oportunidades excelentes, entonces espera. Puede permitirse el lujo de esperar. El dinero le viene diaria, semanal, mensualmente. El inversor acaudalado sabe lo que busca y no le importa esperar meses o incluso años para su próxima inversión (a eso lo llaman paciencia).

Pero, ¿qué pasa con el pequeño inversor? Este se siente empujado a ganar dinero. Y a cambio siempre "presiona" al mercado a hacer algo por él. Pero tristemente, el mercado no muestra ningún interés. Cuando el pequeño inversor no está comprando acciones con rentabilidades del 1 o 2% está en las Vegas o Atlantic City tratando de ganar a la ruleta a la banca. O se gasta 20 dólares a la semana en lotería o está "invirtiendo" en algún esquema de locos del que su vecino le ha hablado (en secreto, por supuesto).

Y como el pequeño inversor trata de forzar al mercado a hacer algo por él, se garantiza ser un perdedor. El pequeño inversor no entiende de valoraciones por lo que paga demasiado. No entiende el poder del interés compuesto (o capitalización) y no entiende el dinero. Nunca ha oído el dicho "Aquel que comprende el interés, lo gana. El que no, lo paga." El pequeño inversor es el americano medio y está totalmente endeudado.

El pequeño inversor está empeñado hasta las cejas. Y en consecuencia, está siempre sudando (sudando para pagar las letras de la casa, el frigorífico, el coche o la máquina de segar). Es impaciente y quiere siempre aprovecharse. Se dice a sí mismo que tiene que hacer dinero (rápido). Y sueña con esos grandes y jugosos pavos. Al final, el pequeño inversor pierde su dinero en el mercado, o apostando o lo desperdicia en proyectos sin sentido. Esté "pringado del dinero" se pasa la vida empeorando su situación financiera.

Pero he aquí el lado irónico de la historia. Si, desde el principio, el pequeño inversor hubiera adoptado una estrategia estricta de no gastar más de lo que gana, si hubiera capitalizado sus ahorros extra en inversiones rentables, entonces en el debido tiempo el dinero le vendría diaria, semanal, mensualmente, justo como al hombre rico. Se hubiera convertido en un empresario ganador en vez de un patético perdedor.


Regla 4: INVERSIÓN EN VALOR


El único momento en el que un inversor medio debe salirse de su sistema de capitalización es cuando un mercado ofrece un valor excepcional. Considero que una inversión es de gran valor cuando ofrece: (a) seguridad, (b) rentabilidad atractiva y (c) una buena oportunidad de revalorizarse (en precio). En todos los demás casos, el camino de la capitalización es más seguro y seguramente mucho más rentable, al menos en el largo plazo.

lunes, 16 de julio de 2012

Regla Límite de Howe

MRC logo


La versión original en inglés está disponible en la página oficial de los autores: Moore Research Center, Inc.  


El análisis de este fenómeno ha demostrado indiscutiblemente su validez y valor como herramienta auxiliar de especulación en aquellos mercados de futuros con límites en la variación diaria del precio. El comprender y aplicar sus preceptos, especialmente en mercados dinámicos el los que existen tantas oportunidades, ayuda a mejorar cualquier técnica de especulación.

Robert Howe, analista técnico y de mercado, nos ofreció por primera vez esta observación en 1977. La Regla Límite de Howe sugiere que una vez se alcanza el precio límite diario, este se convierte en objetivo que el mercado volverá a tantear y, finalmente, superar, al menos brevemente y habitualmente más pronto que tarde.

¿Por qué ocurre esto? Una función principal de cualquier mercado es explorar y descubrir el valor -de las cosas-. Un mercado interrumpido artificialmente en su búsqueda del valor actual se queda insatisfecho y deja preguntas críticas -como hasta dónde y con qué urgencia el mercado continuará buscando- sin resolver con anterioridad a actividad de negociación adicional.

Valor y Utilidad

A diferencia de los objetivos que se derivan de las formaciones charlistas y de formulaciones matemáticas, que como mucho, se aproximan a un rango de llegada, la Regla Límite de Howe identifica objetivos de precios precisos que pueden ser útiles tanto para traders de corto como de más largo plazo.

Por ejemplo, si un mercado alcanza su precio límite subiendo:
Los traders de corto plazo podrían comprar con más confianza en cualquier retroceso (ya sea intradiario o en días posteriores).
Los traders que ya tienen posiciones largas se inclinarían a mantenerlas.
Posibles traders bajistas dejarían de tomar una acción inmediata y esperarían hasta que el nivel de precios fuera superado.


Comprendiendo los principios de la Regla Límite de Howe, cada uno de los participantes arriba mencionados esperaría que la caída, de existir, fuera de poca importancia a no ser que, y hasta que, el precio límite fuera excedido en al menos un tick (mínima variación posible en un mercado determinado).

No obstante, si después de una tendencia prolongada el precio límite fuera superado sólo brevemente y con indecisión, y este fracaso, al final, se mantuviera, entonces la vuelta podría ser inminente (pues el mercado manifiesta agotamiento). Como corolario, un movimiento límite inesperado en la dirección opuesta a la tendencia principal puede ser un primer aviso de cambio de tendencia (al cambiar todos de parecer al mismo tiempo). Finalmente, un movimiento límite brusco surgido de un periodo de acumulación o distribución puede significar el inicio de una fuerte nueva tendencia (como cuando todos intentan atravesar una puerta al mismo tiempo).

En la rara ocasión en la que el primer vencimiento deja un precio límite "pendiente" (sin ser superado antes de su último día de negociación), este precio límite se convierte en futuro objetivo para los siguientes primeros vencimientos. Pudiéndose convertir así en un imán para agotamientos de tendencia de medio y largo plazo. Es decir, la tendencia principal podría mantenerse y/o una nueva tendencia quedarse sin empezar hasta que el límite "pendiente" sea superado, a menudo creando un doble techo o suelo.

¿Por qué es así? El primer vencimiento está más ligado al contado y es usado en los gráficos semanales y mensuales. Con frecuencia, los precios límites en los contratos de vencimiento cercano se convierten en puntos de soporte/resistencia en los gráficos semanales/mensuales. Los límites que se quedan pendientes de vencimientos más a futuro son suyos propios y normalmente carecen de importancia a su vencimiento.


Análisis y Conclusiones

Moore Research Center, Inc. ha evaluado estadísticamente los precios límite negociados, superados y pendientes de algunos mercados que tienen establecidos dichos límites diarios. El análisis destaca la importancia histórica clave del primer y tercer día que sigue inmediatamente a la negociación en el precio límite. En la mayoría de esos mercados, como uno puede esperar, el precio límite es superado al siguiente día en un 50-70% de las veces. En casi todos los mercados estudiados, el análisis sugiere que la probabilidad histórica de superar el precio límite es frecuentemente superior al 80% en los 3 primeros días, y del 90% en 7 días de negociación.